Las
fechas de vendimia en algunas regiones se han adelantado hasta 20 días
en los últimos 50 años, lo que conlleva cambios de todo tipo en las
bodegas: agrícolas, tecnológicos, organolépticos, organizacionales,
económicos, etc. Éste es sólo un ejemplo de cómo el cambio climático
afecta a las bodegas. Probablemente por ello el sector vinícola sea de
los más concienciados en la adopción de medidas para contrarrestarlo,
como la iniciativa de los bodegueros españoles “Wineries for Climate
Protection”, a la que estamos adheridos.
En el
caso particular de Raimat, la adhesión al Programa de Acuerdos
Voluntarios de la Oficina Catalana de Cambio Climático nos ha permitido
iniciarnos en el compromiso de contribuir, en la medida que está en
nuestras manos, a la reversión de los efectos del cambio climático.
Gracias
a nuestra adhesión, hemos podido cuantificar de manera sencilla cuáles
son nuestras emisiones, y hemos implantado medidas para reducirlas, por
ejemplo, reducir progresivamente el peso de nuestras botellas, instalar
sistemas de iluminación de alta eficiencia, reducir el consumo de
gasóleo, etc.
La adhesión nos ha permitido también
acceder a nuevos conocimientos para aplicar mejoras en aspectos no tan
obviamente relacionados con la emisión de gases de efecto invernadero.
Por ejemplo, hemos aprendido que si repartimos en dos balsas el agua que
almacenamos a la espera de ser depurada, reducimos considerablemente
nuestras emisiones, ya que evitamos la generación de metano.
Análogamente, el objetivo de reducir nuestras emisiones nos ha conducido
también a la reducción en el consumo de agua. Cuanta menos agua
consumamos, menos GEI emitiremos para gestionarla: ¡en el período que va
de julio de 2011 a junio de 2012 hemos reducido un 25% el consumo de
agua en nuestra bodega en comparación con el mismo período del año
anterior!
En aplicación de una política de mejora
continua, la experiencia acumulada en estos dos años de adhesión al
Programa nos ha servido de estímulo para dar un paso más y calcular
nuestro inventario de emisiones de acuerdo a la Norma ISO 14064, cuya
verificación tenemos prevista para las próximas semanas. Con ello,
dispondremos de una visión todavía más detallada de nuestros procesos y
las posibilidades de reducción.
Desde estas
líneas, nos gustaría animar a todos las organizaciones a adherirse al
Programa. Los comienzos son muy sencillos, el Programa incluye un
procedimiento simplificado pensado para las organizaciones que no
disponen de expertos en temas medioambientales y, para las
organizaciones más avanzadas, supone un primer paso estimulante para
apostar por mayores retos.
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